sábado, 31 de julio de 2010

Gainsbourg o una visita a la música francesa

En verano una de las cosas que más apetece es meterse en un cine fresquito durante al menos hora y media. Si sois de la misma opinión, todavía podéis ver en los cines Renoir de Zaragoza una pelicula diferente, algo extraño en una cartelera llena de terceras y cuartas partes y remakes: "Gainsbourg".

"Gainsbourg" cuenta, como su nombre indica, la vida del famoso cantante francés Serge Gainsbourg, que a algunos les sonará por ser el autor de canciones como Je t'aime... moi non plus y a otros por sus relaciones con Brigitte Bardot y Jane Birkin (y a otros a chino, ya me imagino). La película muestra cómo fue su infancia, su pasión por la pintura, sus relaciones con sus amantes, con sus amigos, con su familia, cómo se hizo músico si a él lo que le gustaba era el dibujo y mil cosas más.

Lo que hace que esta película sea diferente de cualquier otra sobre la vida de un músico es la manera tan especial de reflejar su mundo interior. El director es Joann Sfar, un conocido dibujante francés (quizá a los más puestos en cómic les suene "El pequeño vampiro" o "El gato del rabino") que ha volcado en el cine lo que ya hizo en papel. Y ha incluido los personajes que representan los pensamientos del pequeño Lucien (el verdadero nombre de Gainsbourg) y "La Jeta", una figura que lo acompaña como los diablillos que aparecen sobre el hombro de los personajes de dibujos animados.

Si además conocéis algo del repertorio del cantante, reconoceréis algunas de sus canciones, escogidas no tanto por ser las más conocidas sino por reflejar el momento en las que las compuso, siguiendo siempre el relato. Y si no las conocéis, nunca está de más, pero podréis disfrutar igualmente de la historia.

Os dejo un aperitivo:



lunes, 12 de julio de 2010

Y la Selección ganó su estrella

Desde esta noche la selección española de fútbol tiene una estrella sobre su escudo, señal de que es poseedora de un título mundial. Después de sufrir casi dos horas hasta que el gran Iniesta marcó gol (dedicado al desaparecido Jarque en su camiseta, por lo que el árbitro le sacó tarjeta amarilla), millones de personas no pueden dejar de sonreir (y otros millones de llorar, que a los holandeses supongo que no les habrá hecho mucha gracia). Merecido es poco, el partido estaba ganado desde el primer momento, porque (y siento mucho decirlo) los holandeses se descalificaron con entradas durísimas como la del pobre Xabi Alonso.


Pero lo mejor del Mundial todavía no ha llegado, o eso dicen los economistas. A partir de ahora aumentarán los turistas, se mejorará la confianza en España y todo lo relacionado con ella, se producirá más, subirá la tasa de consumo en los hogares... Al menos supongo que a partir del martes porque hoy va a ser dificil, ya que la gente sigue celebrando la victoria a golpe de vuvuzela y no creo que tengamos el cuerpo para nada.

Para los que estaban preocupados: no, no tendremos que pagarle las primas a los jugadores por ganar, eso sale del premio de la FIFA. A otros que les ha tocado la lotería es a la Real Federación Española de Fútbol, un "gordo" de 24 millones nada más y nada menos. Al final si que va a ser verdad que ganando se sale de la crisis... aunque solo sea algunos.

lunes, 5 de julio de 2010

¿No me digas que "Tintín en el Congo" es racista?

Ayer saltó la noticia: un congoleño residente en Bélgica ha pedido que sea retirado de la venta el segundo album de Tintín o que se inserte una nota explicando el contexto en el que fue dibujado. El juicio en estos momentos está paralizado ya que la editorial Moulinsart ha pedido que Bienvenu Mbutu Mondondo, el demandante, deposite una fianza por si tuviera que pagar las costas y estuviera fuera del país. Hasta que no tenga lugar, el proceso seguirá paralizado.

Pero la cuestión por la que lo traigo aquí es otra: ¿es realmente necesario decir que es racista? Desde casi las primeras viñetas es palpable el tufillo paternalista... típico de la Bélgica de los años 30. Desde luego, "Tintín en el Congo" no puede ser leído como la mayoría de los tebeos de Tintín ("Los cigarros del faraón", "Las joyas de la Castafiore") como una simple historieta, sino como la propaganda que es (al igual que, no lo olvidemos, "Tintín en el país de los soviets").

Hergé en realidad no quería hacer una aventura en el Congo, él pensaba ya en la siguiente historia, "Tintín en América", y fue la editorial quien pidió que lo hiciera para intentar que los belgas (que se habían encontrado siendo metrópolis del Congo casi sin comerlo ni beberlo, como donación del "gran" Leopoldo II) se sintieran responsables del lugar. Nadie en el momento lo encontró racista, porque la sensibilidad entonces era muy diferente a la de hoy.

¿Es necesario saber todo esto para entenderlo? Quizá sí, aunque vivamos en una sociedad en la que la información está al alcance de la mano y casi cualquiera pueda tenerla. ¿Pero es imprescindible retirarlo de la venta? Ahí discrepo totalmente. ¿Cómo vamos a conocer cuáles eran los pensamientos de nuestros abuelos si retiramos todo lo que repudiamos? Sinceramente, creo que este album tendría que leerse para ponernos en frente de todas esas afirmaciones racistas y darnos cuenta de la barbaridad que son.

Por cierto, para reconciliarnos con Hergé después de "Tintín en el Congo", lo mejor es leer "El loto azul". Nada que ver...

sábado, 3 de julio de 2010

¿De verdad somos todos iguales?

Ayer escuché una noticia en el telediario: un hombre mató a su pareja. Pero fue el tratamiento de la noticia me extrañó, sin una imagen y con tan solo un breve comentario. Claro, me falta decir que su pareja era otro hombre. Si es una mujer la que muere aparece siempre el número contra el maltrato, ¿pero qué pasa si es un hombre el que es maltratado? ¿O si una mujer asesina a otra, su pareja? ¿A quién pueden acudir? ¿No es acaso el mismo tipo de crimen?

Por lo visto parece que no. Si el asesinado es un homosexual o una lesbiana parece que no es violencia de género, porque claro, el género del asesino es el mismo. El problema es que el término vuelve a hacer invisible a una parte de la población, la misma de siempre.

Estos días se celebran las fiestas del Orgullo Gay en Madrid y a los que estuvimos por allí no nos pudo dejar de sorprender la libertad con la que las parejas de hombres se besaban en público. Puede parecer cosa del pasado, pero si lo piensan bien ¿cuántas veces han visto besarse a dos hombres o dos mujeres en público? ¿Y sin oir comentarios de los que les rodean? Creemos que somos muy avanzados en este país, pero solo hay que echar un vistazo para darse cuenta que no tanto como parece.

PD. Periodismo Humano ha hecho una serie de reportajes sobre la igualdad de gays y lesbianas. Especialmente desconocida es la situación en Irán, que puedes leer aquí.

viernes, 2 de julio de 2010

¡Huelga!

Cuatro días en Madrid... y los cuatro con huelga de Metro. A pesar de eso sobrevivimos de la tournée por la capital y da para reflexionar un poquito sobre todo esto.

La causa de la huelga es que se ha incumplido el convenio colectivo por el que se rigen los trabajadores de Metro Madrid al recortar su salario un 5%. Juro que he buscado la causa por diversas fuentes, pero solo me he conseguido enterar por un trabajador del Metro y por la web kaosenlared, que a pesar de no ser la objetividad en persona es la única que lo explica. Y hablando de objetividad, también ha habido un bonito titular en ABC: "Huelga salvaje en Metro de Madrid para evitar apretarse el cinturón". Pero bueno, que me voy del tema...

De estos cuatro días (hoy se cumple el quinto de huelga), dos no ha habido servicios mínimos... que el resto han sido del 50%, es decir, que si la frecuencia habitual es de 3 minutos con ellos era de 6. Vamos, la mitad de lo que tarda la mayoría de los buses de la capital del Ebro, así que mire usted qué huelga. Los trabajadores que se negaron a cumplir los servicios mínimos serán expedientados y algunos despedidos, aunque una de las reclamaciones de la huelga es que esto no ocurra.

Y con la huelga, la historia de siempre: los usuarios que se quejan, los políticos discutiendo si hay que hacer una ley de huelgas... En fin, ya veremos cómo acaba todo esto y quién sale perjudicado. Por ahora, está claro, han sido los clientes, los huelguistas expedientados... y los turistas como servidora.